El mantenimiento y reparación de las redes de alcantarillado y saneamiento han evolucionado notablemente en los últimos años, ofreciendo alternativas como la innovadora pocería sin zanja, que es una alternativa novedosa para mejorar los procedimientos y la logística de la pocería tradicional. Ambas metodologías presentan sus propias ventajas y desafíos, siendo crucial elegir la más adecuada según las circunstancias. En este artículo, exploraremos las diferencias entre estas dos técnicas y cuándo es más recomendable optar por una u otra.

Pocería tradicional

La pocería tradicional, también conocida como convencional, implica la excavación manual o mecánica de zanjas para acceder a las tuberías subterráneas, un método arraigado y efectivo.

Ventajas

  • Precisión: La excavación manual permite un control minucioso, garantizando precisión en las reparaciones y el acceso a las tuberías.
  • Flexibilidad: Se adapta a diversos tipos de suelos y condiciones geográficas.
  • Fiabilidad: Al ser una técnica probada y utilizada durante décadas, se considera confiable para la mayoría de los proyectos de reparación de alcantarillado.

Desventajas

  • Tiempo y costo: La excavación de zanjas puede ser un proceso costoso y lento, además de prolongar el tiempo de ejecución del proyecto.
  • Impacto ambiental: La excavación puede dañar el entorno, especialmente en áreas urbanas densamente pobladas. Además, con este procedimiento se generan gran cantidad de residuos.

 

Pocería sin zanja:

La pocería sin zanja, también conocida como no destructiva, es una técnica más reciente que permite reparar tuberías sin necesidad de excavar zanjas, ofreciendo múltiples beneficios.

Ventajas

Reducción del tiempo y costes: Al evitar excavar zanjas, la pocería sin zanja reduce significativamente el tiempo necesario para completar un proyecto, así como los costes asociados con la mano de obra y el equipo requerido para la excavación y restauración del terreno.

Menor impacto ambiental: Al no perturbar el suelo circundante, esta técnica presenta un menor impacto ambiental en comparación con la pocería tradicional. No se generan residuos de excavación, lo que contribuye a la preservación del entorno natural y reduce la necesidad de transporte y eliminación de desechos.

Mayor seguridad: La pocería sin zanja elimina el riesgo de accidentes asociados con la excavación manual, como colapsos de zanjas o lesiones a los trabajadores. Esto crea un entorno de trabajo más seguro y reduce la posibilidad de interrupciones en el proyecto debido a incidentes de seguridad.

Menos interrupciones para la comunidad: Al utilizar equipos compactos y métodos de trabajo no invasivos, la pocería sin zanja minimiza las interrupciones para los residentes y el tráfico en áreas urbanas. Esto permite que el proyecto avance de manera más fluida y con menos molestias para las personas que viven y trabajan cerca del sitio de trabajo.

Mayor eficiencia y precisión: El equipo tecnológico que se utiliza en los procesos de la pocería sin zanja, permiten una ejecución más eficiente y precisa del proyecto. Esto reduce la posibilidad de errores y garantiza una calidad superior en las reparaciones realizadas.

Nuevas tecnologías en la pocería sin zanja:

Inspección de tuberías con cámaras: Las cámaras de inspección de tuberías permiten a los técnicos visualizar el interior de las tuberías sin la necesidad de excavar, lo que facilita la detección de problemas como grietas, obstrucciones, roturas, entre otros problemas que puede presentar la red.

Rehabilitación de tuberías mediante encamisado con manga: Este método permite la rehabilitación de tuberías dañadas, de manera rápida y efectiva, mediante la utilización de una manga de fibra de vidrio, impregnada de resina Epoxi de gran calidad, la cual se introduce de pozo a pozo para formar un nuevo tubo por el interior de la tubería deteriorada, evitando así los inconvenientes asociados con la excavación tradicional.

En conclusión, la elección entre pocería tradicional y sin zanja depende de diversos factores, como tiempo, coste, ubicación y naturaleza del proyecto. La pocería sin zanja destaca por ser rápida, precisa, económica y respetuosa con el medio ambiente, mientras que la tradicional sigue siendo un método antiguo utilizado durante muchos años con buenos resultados en casos puntuales. Al colaborar con expertos como GSC Servicios, se garantiza una evaluación precisa y la selección de la técnica más adecuada para cada situación, asegurando resultados óptimos.

Otros artículos de interés:

Tecnologías innovadoras en la pocería sin zanja: Una visión detallada

Puedes contactar con nosotros:

Al correo :
avisos@gscservicios.es

Llamarnos al  :
638 067 316

Venir a visitarnos!: C/ Laguna del Marquesado nº38
Nave L – 28021 Madrid