Seguramente ya habrás oído hablar de la rehabilitación de tuberías sin zanja, pero quizás no sepas en qué casos se puede aplicar o cuáles son sus ventajas.
En GSC Servicios somos especialistas en la aplicación de tecnologías sin zanja y queremos explicarte cómo, cuándo y por qué de estos sistemas cuyo uso se ha incrementado en un 70% frente a las tecnologías convencionales en nuestro país.
Rehabilitación de tuberías sin zanja. ¿Qué es?
Vamos a empezar por el principio ¿Qué es la rehabilitación de tuberías? El desgaste producido por el paso del tiempo y las malas prácticas de los usuarios son la causa de la mayoría de las incidencias que se registran en las tuberías del alcantarillado, y su reparación suele venir acompañada de costosas y molestas obras. Sin embargo, existe otra solución más sencilla, la pocería sin zanja.
La rehabilitación de tuberías sin zanja consiste en aplicar las tecnologías sin zanja a la reparación de tuberías del saneamiento, es decir, se repara la tubería total o parcialmente sin necesidad de hacer obra.
¿Cómo es posible?
Aunque pueda parecer cosa de magia, nada más lejos, se trata de última tecnología. Para realizar correctamente una rehabilitación de tuberías sin zanja, es imprescindible disponer del equipo tecnológico adecuado y de formación especializada. No es posible aplicar estos sistemas sin tener el equipo humano y tecnológico adecuado.
El proceso es bastante sencillo, consiste en la instalación de una manga de fibra de vidrio o de poliéster impregnada de resinas especiales en el interior de la tubería a rehabilitar y el posterior fraguado (endurecimiento) de la misma mediante el uso de agua a alta temperatura o de rayos ultravioletas, según las características de la obra a realizar.
El tiempo de ejecución depende del diámetro de las tuberías y metros a rehabilitar, así como del estado de la instalación. Lógicamente una rehabilitación de grandes diámetros o de grandes longitudes necesitará mayor tiempo de preparación, ejecución y fraguado que otra más pequeña. No obstante si comparamos cualquier rehabilitación de tuberías sin zanja con la reparación tradicional, no solo reducimos enormemente los tiempos de ejecución, además eliminamos las molestias derivadas de la apertura de zanja y por lo tanto ahorramos en los costes.
¿Cuándo se puede utilizar?
Las tecnologías sin zanja presentan múltiples posibilidades de aplicación, pero es en las ciudades donde desarrolla su actividad más importante ya sea en la reparación, sustitución o supervisión de las tuberías, como en los sectores de las telecomunicaciones, energía y agua.
En ocasiones, uno de los problemas más preocupantes para el propietario de una vivienda o negocio puede ser enfrentarse a una reparación de la red de saneamiento, ya que estas suelen derivar en costosas e interminables obras.
Sin embargo, con la rehabilitación de tuberías sin zanja, puede solucionarse cualquier incidencia (fugas de agua, cualquier tipo de obturación, atascos, etc.) rápidamente y sin apenas molestias. Podemos rehabilitar tubos desde 60 mm. hasta 1200 mm., de cualquier material y en cualquier grado de deterioro.
Ventajas de la rehabilitación de tuberías sin zanja
El sistema de rehabilitación de tuberías sin zanja tiene muchas más ventajas que el tradicional sistema de sustitución mediante obra, de las que destacamos las siguientes:
- Rápido y sin molestias: no genera ruidos ni olores. Al no ser necesario abrir zanja eliminamos las molestias propias de las obras.
- Material de excelentes características: Calidad comprobada. La vida media estimada del material es de 70 años.
- Respetuoso con el medio ambiente, no genera residuos y su gasto energético es inferior a otros sistemas.
- Ahorro en los costes: eliminamos los gastos derivados de la obra y su durabilidad está garantizada a largo plazo.
En resumen, la tecnología sin zanja es más racional y sostenible, menos contaminante y comparativamente más económica que la técnica con apertura de zanja. Si quieres realizar una obra de la red de saneamiento evitando cortes de tráfico (carreteras locales, autovías, vías ferroviarias, etc.), parar la actividad industrial (polígonos industriales) o evitar molestias a los vecinos y comerciantes de la zona, la tecnología sin zanja es siempre la mejor opción.